El plan Movele 2015, que entró en vigor el 20 de abril y que subvenciona la compra de vehículos eléctricos, se acabará hoy, según han pronosticado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector. Estas mismas fuentes han señalado que hoy por la mañana quedaban alrededor de 126.000 de euros, lo que supone 20 operaciones.
De esta forma, las ayudas a este tipo de vehículos se quedarán paralizadas al menos dos meses, ya que por «problemas de burocracia y de plazos», el Movea —que engloba el Plan Movele y el PIMA y que estará dotado de 17 millones de euros— no va a poder ser aprobado antes del 1 de enero de 2016.
No obstante, fuentes de Industria han indicado a esta publicación que están buscando la fórmula de seguir impulsando el mercado de vehículos eléctricos, para evitar que en los meses de noviembre y diciembre se produzca un nuevo vacío, tal y como ha ocurrido en los años pasados. Además, el hecho de que se celebren elecciones generales el 20 de diciembre puede suponer un retraso para la publicación del plan en el BOE.
La solución pasaría por que los concesionarios pudieran realizar reservas del presupuesto de 2016, aunque tendrían que esperar para matricular el vehículo a que la normativa estuviera aprobada, aclaran fuentes de los fabricantes a La Tribuna de Automoción. No obstante, consideran que esta medida haría que el mercado no se pare, aunque tiene la contrapartida de que no se sabe cuándo se devolverán los fondos adelantados.
Problemas con una cláusula europea
Las ayudas a los vehículos eléctricos, según ha denunciado este sector, están sufriendo el problema de que están sujetas al reglamento de Minimis de la Comisión Europea (son ayudas que por su baja cuantía no tienen que ser notificadas a Bruselas, como ocurre con el resto de subvenciones estatales), por el que en los últimos dos años y el ejercicio en curso, una empresa o administración sólo se puede beneficiar de un máximo de 200.000 euros.
Como están ligadas a esta cláusula, aprobada en Bruselas en 2013 en el reglamento 1407/2013, el Plan Movele sólo permite matricular 30 coches con ayudas en un trienio (la cuantía es de 5.500 euros para los coches, más 1.000 euros para el punto de recarga), lo que perjudica a las flotas, principales interesadas en este tipo de movilidad.
Por eso, el sector pide que el Movea se vincule a un tipo de programas que no vaya regulado por el reglamento de Minimis. Además, en principio, el programa, que entrará en vigor en 2016, permitirá beneficiar a los vehículos de menos de seis meses, siempre que no se venda a un concesionario.
Pablo M. Ballesteros / Madrid
