Pablo M. Ballesteros / Madrid
Al parecer el director general de Derbi, Pedro Quijada, tiene la costumbre de encerrarse en su despacho con llave. De hecho, según fuentes de la fábrica, Quijada había desaparecido desde hace varios días de la planta de Martorelles y no acudía ni a la Comisión de seguimiento sobre el cierre de la fábrica. En estas reuniones el director de Recursos Humanos había pasado a ser el interlocutor entre la marca y los trabajadores.
Pero hoy fue diferente. El director de la factoría catalana ha acudido a su despacho y “debe ser que no ha cerrado bien con llave”, porque de repente se ha encontrado con toda la plantilla en frente de su mesa. Los trabajadores de Derbi han aprovechado el descanso para ‘visitar’ a Quijada y pedirle explicaciones.
La reunión forzada por los trabajadores, en la que el director general de la planta no ha dado muchas explicaciones, ha durado una hora, ya que ha sido interrumpida por los mossos d’esquadra.
Los operarios de Derbi viven con incertidumbre, “crisis y depresiones”, el casi seguro cierre de Martorelles previsto para el 31 de julio de 2012, la posibilidad de que llegue un inversor externo está lejos.
