Ignacio Anasagasti / Pablo M. Ballesteros / Madrid
Piaggio acaba de comprometerse con el director general de Industria de la Generalitat, Joan Sureda, a “dar continuidad industrial dentro del propio grupo” a la fábrica de motocicletas de Martorelles (Barcelona) más allá del 30 de junio de 2012, fecha que se había fijado para el cierre de la planta, según han confirmado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector.
En una reunión a comienzos de la semana entre Sureda y una delegación del grupo italiano, la empresa “ha puesto encima de la mesa una propuesta” que podría pasar por que la planta de Martorelles se dedicase a “fabricar componentes” para otros centros de producción de Piaggio. En principio, hace unas semanas se especuló con que la factoría catalana pudiese fabricar piezas para motores, unos términos que no han sido detallados en el encuentro con la Generalitat.
Según fuentes del sector, la compañía italiana ahora tiene que “entrar en detalles, concretar el proyecto y los tiempos”, en definitiva ver cómo se podrá hacer realidad y qué consecuencias laborales supondrá, si es que se producen.
La dirección general de Industria, indican las mismas fuentes, se ha comprometido a “hacer un seguimiento” de la propuesta industrial en Martorelles con el objetivo de alcanzar “la máxima continuidad industrial y laboral”. En función de cómo se ejecute el nuevo proyecto, la Administración catalana decidirá qué tipo de “apoyo” se le concede al grupo Piaggio.
Cierre temporal
La fábrica de Derbi permanecerá cerrada hasta el día 12 de enero como consecuencia de un ERE temporal de 52 días acordado en septiembre entre los trabajadores de Martorelles y la dirección del grupo Piaggio, que se ha juntado con varias jornadas de vacaciones que tenían pendientes los operarios.
En la planta catalana, que cumplirá 90 años en 2012, trabajan 195 empleados, después de que 25 fueran prejubilados en julio. En 2012, el centro tiene previsto ensamblar hasta el 30 de junio 12.000 vehículos.
Todas las motos que salgan de Martorelles serán Derbi ya que las 7.000 unidades que se producían de las marcas Gilera y Aprilia se deslocalizarán a las factorías que Piaggio tiene en Italia, aunque estas cifras pueden verse modificadas.