Las primeras previsiones de ventas de 2023 apuntan a un incremento del 4,3% en las operaciones de vehículos de dos ruedas nuevos, lo que implica superar las 210.900 transacciones, según ha comunicado la patronal Anesdor.
Durante un evento organizado por la asociación, su presidente, Jordi Bordoy, junto al secretario general, José María Riaño, han presentado ante los medios cuáles son las expectativas del sector para el curso que comienza, así como un balance detallado de los resultados obtenidos en 2022.
De cara al siguiente ejercicio, los fabricantes esperan que todos los segmentos mejoren sus cifras, con las scooters elevándose un 1,2% hasta las 100.700 firmas, las motocicletas convencionales subiendo un 9,4% hasta las 83.100 y los ciclomotores que reducirán sus caídas a un 2,6% con 15.300.
Asimismo, se espera que los vehículos ligeros con calificación L representen 11.800 del total de ventas señalado. De este modo, los triciclos serán 3.900 (+10,9%), los microcoches 3.700 (+6,8%) y los cuatriciclos 4.200 (+2,8%).
Un futuro “emocionante”
Todo ello, se enmarca en un contexto que el propio Bordoy ha calificado como “emocionante” y que se caracteriza por las distintas transformaciones en las que está envuelta la industria. Principalmente, como consecuencia de una transición ecológica que está trayendo consigo una transición tecnológica que apuesta por modelos de movilidad más sostenible. Todo ello sucede en paralelo a unos importantes cambios en la demanda, que han hecho que la propiedad haya dejado de ser una cuestión tan relevante para algunos usuarios que se decantan por alternativas como el carsharing.
Teniendo todo esto presente, Riaño ha aprovechado para reivindicar el potencial de la moto en la transición ecológica de las ciudades, al tratarse de una opción de movilidad urbana que tiene un coste de adquisición y mantenimiento inferior al de otras opciones, que ocupa menos espacio, descongestiona el tráfico y genera un volumen más bajo de emisiones, hasta el punto de que su nivel de contaminación por pasajero y kilómetro recorrido es equivalente al de un autobús urbano y la mitad que un turismo.
A la vista de estas consideraciones, la patronal considera injustificado el olvido sistemático que desde las instituciones se proyecta sobre las dos ruedas, como sucede en los Planes de Movilidad Sostenible o el Perte, en los que esta opción de movilidad está completamente ausente. En esta línea, Anesdor lleva reclamando un sistema de etiquetas compatible con las Zonas de Bajas Emisiones que sea más justo y que no equipare a las motos con turismos que generan un mayor volumen de polución, penalizándolas como ocurre actualmente en Barcelona.
Motos made in spain
A nivel de producción, han recordado también que España está apostando fuertemente por la fabricación de modelos eléctricos, con hasta quince insignias ensamblando sus modelos en nuestro país: Silence, Seat, Eezon, Nuuk, Pursang, Ray, Torrot, Velca, Ebroh, Ghatto, Nerva, Scoobic, Stark Future, OX Motorcycles y Quazzartech. Es por ello, que seguirá colaborando en proyectos como el Consorcio de Baterías Intercambiables, una iniciativa que trata de superar las limitaciones energéticas de las dos ruedas con un sistema de acumuladores compartidos y alquilables en la ciudad.
La nota amarga del año la pone el Salón Vive la Moto, previsto para celebrarse en Barcelona en 2023 y que finalmente no se llevará a cabo, como consecuencia de la falta de acuerdo entre los organizadores y las marcas. Como ha explicado Riaño, esto se debe a una falta de interés en el modelo tradicional de ferias de automoción que se viene acusando durante los últimos años. El director general de ventas de Suzuki, Juan Carlos Andrés Aguado, que ha estado presente en la rueda de prensa, ha confirmado que las insignias están trabajando para reformular este tipo de encuentros y generar un modelo más atractivo para todos.
Un 2022 de crecimiento
La patronal también ha ampliado algunos detalles sobre los resultados de 2022, un año en el que se alcanzaron las 202.000 matriculaciones (+4,6%), recuperando así cifras previas a la pandemia, en contraste con los turismos que caen un 5,4%. El pasado curso confirmó un crecimiento del 14,2% en la última década dentro de los vehículos L.
Es notable que las adquisiciones para circular por poblado se han elevado un 13,3%, a la vez que las adquisiciones para largas distancias han bajado un 0,2%. Por su parte, las motos pensadas para el campo caen un 8,1%. Esto repercute en que los diseños de menor cilindrada, de entre 51cc y 125cc, son las únicas que mostraron crecimiento (+10,3%).
Por canales, destaca la situación de las empresas que, si bien son las únicas que han mermado sus compras de motocicletas con 20.034 firmas (-4,5%), también son en exclusiva las que han crecido en cuatriciclos con 1.204 ventas (+60,7%) debido a la fuerte apuesta que están manteniendo en torno a los microcoches.
