Tras los terribles meses comprendidos entre marzo y julio, en los que las caídas fueron una constante como consecuencia de la falta de chips, de la inflación y de la guerra en Ucrania, noviembre logra encadenar cuatro meses en positivo con 73.776 matriculaciones. Esto significa, sin embargo, un crecimiento del 9,77%, tras dos meses en los que el desarrollo había logrado superar el doble dígito. Pese a esta tendencia positiva, consecuencia en gran medida de un incremento en la producción, el sector es cauto a la hora de hablar de recuperación, pues si bien han logrado hacer reajustes que les han permitido capear la situación, los problemas de fondo siguen estando ahí. De hecho, los guarismos mencionados aún se encuentran un 24,09% por debajo de las 97.187 transacciones realizadas el undécimo mes del año anterior al confinamiento.
En términos acumulados, a falta de un mes para completar el curso, alcanzar el breakeven anual se torna ya imposible. Con 748.185 ventas (-5,26%) en lo que va de ejercicio, se necesitarían 128.660 operaciones (+47,68%) en diciembre para igualar el curso precedente, algo que ni las previsiones más optimistas contemplan.
Los de gasolina siguen reinando
Por motorizaciones, los de gasolina —incluyendo los híbridos—no solo son los que más operaciones aglutinan, con 51.446 unidades, sino que son además los que más crecen (+16,57) y los que más cuota acaparan (69,73%).
En cuanto a los diésel, son los únicos que retroceden con 14.094 unidades (-10,73%) y un 19,10% de las ventas totales. Los eléctricos con 8.236 adquisiciones, suben un 13,01% y se hacen con un 11,16% del cómputo. De hecho, son los únicos que en la comparativa con 2019 han mejorado sus cifras, al crecer un 406,52% respecto a las 1.626 ventas.
En cuanto a segmentos, los líderes indiscutibles son los todoterrenos compactos, pues consiguen los mayores volúmenes totales con 27.400 matriculaciones (+13,31%), siendo también los favoritos dentro de los de gasolina —con 15.586 operaciones (+20,89%)— y de los diésel —con 4.142 firmas (-12,52%). La plata se la llevan los todoterrenos pequeños, con 14.354 operaciones (+12,40%), seguidos de los utilitarios con 12.221 (+11,49%).
Toyota, marca líder con el coche más vendido
Por marcas, Toyota continúa siendo la más vendidas, con 7.853 operaciones (+44,28%), seguida de Kia, con 5.735 transacciones (+11,47%). La sorpresa la da Renault, que supera a Peugeot y Hyundai, haciéndose con la tercera posición gracias a sus 5.488 firmas (+39,36%), a pesar de que en el acumulado es la coreana la que conquista el bronce con 55.070 unidades (+7,98%).
Si hablamos de modelos, el Toyota Yaris Cross obtiene el oro con 1.856 adquisiciones (+95,16%), la plata es para el Fiat 500 con 1.803 (+112,87%) y el Dacia Sandero completa el podio con 1.724 (-23,85%).
A la vista de estos resultados, varias asociaciones del sector coinciden en que el año cerrará con 820.000 ventas. Desde Anfac recuerdan que las malas cifras en cuanto a transacciones están ligadas a la incapacidad de superar los problemas de producción, como consecuencia de las distintas casuísticas mencionadas al inicio. Del mismo modo, Faconauto apunta que las cifras serán muy similares a las de la crisis de 2008 y señalan un descenso en el precio de los carburantes y una reactivación de la fabricación como únicas soluciones para que la situación mejore en 2023. Por su parte Ganvam ha puesto de manifiesto que el incremento de los costes de ensamblaje ha generado que las firmas cuenten con un margen más reducido a la hora de hacer ofertas, lo que ha hecho que su competitividad también se contraiga.
