La Asociación Nacional de Empresas de Auxilio en Carretera (Aneac) ha denunciado la intención por parte del Gobierno de liberalizar el sector de la asistencia a conductores, eliminando excepcionalmente la exigencia de estar en posesión de la calificación V5 que hasta ahora se exigía a este tipo de vehículos. A modo de protesta contra esta alteración, ha convocado una marcha lenta en Madrid frente al Ministerio de Interior para el próximo 7 de octubre.
Según ha informado la entidad a La Tribuna de Automoción, varias organizaciones habían participado en el proceso de elaboración de un proyecto de Real Decreto, cuyo propósito es sustituir al 159/2021 del 16 de marzo. El principal cambio que se busca implementar es la posibilidad de realizar reparaciones in situ a vehículos con masas máximas autorizadas mayores de 7.500 kg, al considerarse que el traslado de este tipo de modelos y sus correspondientes mercancías hasta el taller entrañan un mayor riesgo potencial para los operarios y para el resto de conductores que realizar la intervención en la propia vía.
Sin embargo, de acuerdo a la Aneac, después de que el texto fuera firmado por varias entidades más, entre ellas Conepa (Federación Española de Empresarios Profesionales de Automoción) y REAC (Red de Empresas de Auxilio en Carretera), el Ministerio de Interior introdujo modificaciones sustanciales que no fueron consensuadas y de las que las demás partes tuvieron constancia a través de un informe elaborado por la CNMC.
De acuerdo al portavoz de la patronal de auxilio en carretera, Julián Santamarina, dejar que las reparaciones puedan ser realizadas por vehículos sin calificación V5 significa “uberizar el sector”. Por un lado, denuncia que esta práctica resulta nociva en términos de peligrosidad, ya que las operaciones podrán llevarse a cabo por personas que no cuentan con formación en seguridad y que no estarán en posesión de modelos homologados. Asimismo, señala que, en un clima de precariedad y alta competitividad por parte de las aseguradoras, esto puede ser utilizado como un elemento más de presión sobre las empresas de asistencia.
“Si esto sale adelante, una persona con una moto y una batería en el cofre podría dedicarse a arrancar coches por cinco euros”, ha apuntado Santamarina, que recuerda que más del 70% de las actuaciones de las grúas consisten en pequeñas intervenciones de este tipo.
Otras cuestiones pendientes
Aneac ha aprovechado para comentar que otra de sus peticiones, concretamente efectuada a la DGT, por la que se proponía la sustitución de los rotativos amarillos que llevan los vehículos de asistencia por unos azules como los de la policía, fue rechazada. La asociación considera esta medida como un importante cambio que incitaría a los usuarios a tener una mayor precaución al aproximarse a los gruistas, evitándose así posibles accidentes.
Por último, cabe señalar que las movilizaciones anunciadas en julio y que finalmente no llegaron a producirse, no están relacionadas con ninguna de las situaciones mencionadas anteriormente, sino con el llamamiento a una regulación de las relaciones entre las empresas de grúas y las aseguradoras. En esa ocasión, los paros no se materializaron ante el compromiso de la DGT de convocar negociaciones. Sin embargo, la Aneac ya ha señalado que estas no habrían mostrado ningún avance, lo que hace que también puedan llevarse a cabo otras protestas en el corto plazo relacionadas con esta cuestión.
3 comentarios
Las huelgas, los paros, las marchas lentas, las denuncias en medios de comunicación "liberal", ante el poder casi absoluto de algunas compañías de asistencia, nunca han servido para nada, ruido, del que se carcajean todos los implicados. Un servicio público que afecta a toda la población, en manos de la iniciativa privada, en el que 11.000 trabajadores hacen el trabajo de 40.000, y algunos pierden la vida, prevalece el interés comercial sobre la seguridad de los ciudadanos, y quien más debieran denunciarlo: los grandes medios como TV, prensa, ... se callan, porque si lo cuentan se podrían quedar sin alguno de sus principales clientes. Vergonzoso para todos, humillante para algunos, ...pero asi es este país, así lo están dejando muchos políticos, es una forma de que la "okupación" llegue a todos los sectores impunemente. Si, hay quien OKUPA los derechos y libertades del trabajador sin pestañear.
Soy gruista pequeño autonomo y pienso que todos tenemos derecho a comer ,, no solo los grandes empresarios con increíbles flotas de gruas. Todos tenemos derecho a crecer
LO QUE TENEIS QUE HACER LAS GRUAS, ES NO MONTAR A LOS CLIENTES EN LAS GABINAS Y LLEVARSELOS HASTA EL DESTINO, PUES,LES QUITAIS EL TRABAJO A LOS TAXISTAS QUE NOS DEDICAMOS A ESO Y PODER CRECER, ESO ESTA PROHIBIDO Y TODA LA RESPONSABILIDAD ES DEL DUEÑO DE LA GRUA ,EL DIA QUE LES PASEN A LOS CLIENTES ALGO SE ENTERAREIS.solo hay una una coletilla que dice ( por seguridad se pueden montar hasta sacarlos a un lugar seguro si el lugar donde causa la averia lo fuera peligro ,esperar el vehiculo para las personas. )