AECA-ITV, la asociación que agrupa las estaciones que realizan estos exámenes, presentó hoy el cuarto estudio «Contribución de la ITV a la Seguridad Vial y al Medio Ambiente», realizado de la mano de la Universidad Carlos III de Madrid. En este indicaron que solo el pasado año, con las cifras de siniestros y fallecidos, esta inspección evitó 148 muertes, mientras que, si la hubieran superado los vehículos accidentados, se habrían evitado otras 146. Ante esto, resulta llamativo que el absentismo haya pasado del 21,25% en 2020 al 26,46% en turismos, según cifras de la organización, mientras que en furgonetas fue del 54%, cuando un año antes era del 48,53%, y en ciclomotores han evolucionado del 61,91% al 65,1%.
De esta manera, si se ponen los números encima de la mesa, el último ejercicio no acudieron 4.171.227 coches, tampoco fueron 3.242.570 furgonetas, ni 1.535.722 motocicletas. Por ello, una vez más, la dirección de la asociación solicitó medidas al gobierno para rebajar estos registros y perseguir a los infractores. Entre las propuestas que se dieron estaba el que las aseguradoras no prorroguen el seguro a los vehículos que no la tengan en vigor o no la hayan superado.
Ruedas, emisiones y alumbrado, principales defectos encontrados
En cuanto a los automóviles que sí acudieron, el 19,07% de los turismos no superaron la inspección en su primer intento, el 26,39% en el caso de las furgonetas y el 17,1% en el de las motos y ciclomotores.
Entre los fallos más frecuentes encontrados entre los coches destacan, en un 24% de las ocasiones, problemas en el eje, ruedas, neumáticos y suspensión; en un 23% el alumbrado y señalización; y en un 19% las emisiones contaminantes. En cuanto a los ciclomotores, en el 21% de los rechazos había fallos en el alumbrado y señalización, en el 20% eran otros, y en el 13% en las emisiones contaminantes. Y, en cuanto a las motocicletas, los principales defectos graves vienen del alumbrado y señalización (34%), las emisiones contaminantes (21%) y el acondicionamiento exterior, carrocería y chasis (12%).
Finalmente, los vehículos comerciales muestran sus principales problemas en el alumbrado y señalización (27%), los ejes, ruedas, neumáticos y suspensión (21%) y los frenos (15%).
Además, reseñaron que los principales contratiempos llegan con los vehículos más veteranos, y eso en un país donde la edad media se sitúa en los 11,3 años, si se tienen en cuenta los modelos de menos de tres décadas, según apuntó Guillermo Magaz, director gerente de AECA-ITV, pues, si se tuvieran en cuenta los que ya se pueden inscribir como vehículos históricos, el registro ascendería por encima de los 14 años.
La ITV salva vidas
Otra de las cifras que se puso sobre la mesa durante la presentación del estudio es que el 5% de los accidentes que se producen en nuestro país están provocados por el estado del vehículo. Es por ello que, según el estudio presentado y elaborado por el centro de educación superior de la capital, gracias a la ITV se evitaron 15.641 siniestros viales, 13.110 heridos y 148 muertes, unas cifras que suponen un ahorro de 395 millones.
Y, teniendo en cuenta la implicación de automóviles sin tener esta inspección en regla, si la hubieran pasado se habrían ahorrado 13.517 siniestros, 11.643 heridos y 146 muertes. Todo, con una repercusión económica de 370 millones de euros.
Si a esto sumamos el impacto medioambiental gracias al control de emisiones, estas estaciones han evitado 575 víctimas prematuras en 2021 por exposición a partículas, lo que representa 706 millones, y, si todo el parque pasara el examen, se sumarían otros 207.