Stellantis ha desvelado que reforzará su rama crediticia en Europa, con la firma de acuerdos para crear joint-ventures en nueve países de la región con tres entidades financieras diferentes: BNP Paribas, Crédit Agricole y Santander Consumer. Esta última será la responsable de las operaciones españolas.
Otros países que quedarán bajo el paraguas de influencia de la firma de Ana Botín son Francia, Italia, Bélgica, Polonia, Países Bajos y Portugal, aunque este último lo hará a través de un acuerdo comercial que dependerá, probablemente, de Madrid. En Austria, Alemania y Reino Unido, la gestión recaerá en BNP.
El objetivo, según el consejero delegado del consorcio italo-franco-americano, Carlos Tavares, es “permitir a Stellantis ofrecer una gama comprensiva de productos para todos sus clientes y concesionarios y fortalecer las actividades financieras a escala global”. En EEUU, adquirió el grupo First Investors Financial Services para crear Stellantis Financial Services US el pasado noviembre.
Además de las ramas de crédito, otra de las intenciones de esta operación es la de contar con una empresa de renting y leasing, fruto de la fusión de Leasys y Free2Move. En esta nueva sociedad, el 50% del accionariado estará en manos de Crédit Agricole. La entidad también adquirirá la mitad de FCA Bank y seguirán actuando como financiera para otros fabricantes a través de acuerdos de marca blanca.
A comienzos de diciembre, Carlos Tavares presentó la estrategia de digitalización en la que se enfocaría el grupo que dirige. Entre los objetivos estaba el de hacer uso de la capacidad conectada de sus vehículos para ofrecer pólizas de seguros dinámicas en función de la conducción de sus clientes.
Santander Consumer ya trabajaba con el Grupo PSA a través de su joint-venture PSA Financial Services, creada en 2015. El pasado septiembre, recibió una inyección de capital de 126 millones de euros, haciendo que el fabricante de automoción contase con una participación por valor de 391 millones.