La dirección de la fábrica de Ford en Almussafes va a plantear la aplicación de un nuevo Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) hasta final de año ante la falta de suficientes pedidos para mantener la cadencia diaria de vehículos de 1.640 unidades con la que la planta ha arrancado la actividad en la noche del 23 de agosto, después del descanso estival, según han adelantado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector.
La compañía va a presentar al Comité de Empresa la necesidad de adoptar esta medida laboral en una reunión que está previsto que comience a las 13.00 horas de hoy. El expediente, del que se concretará el número de días máximo probablemente la semana que viene, afectará al conjunto de las instalaciones, es decir, a la fabricación de coches y de motores, aunque la incidencia variará en función de las áreas, de acuerdo con las mismas fuentes.
El nuevo ERTE, que sucede al de causas económicas que estuvo vigente entre el 3 de mayo y el 31 de julio –fue refrendado por UGT y CCOO–, será el sexto que padece la factoría desde finales de 2018. En todos ellos, Ford planteó un complemento salarial hasta el 80%, con el 100% de las pagas extra, las vacaciones y la antigüedad.
