Las marcas se están adaptando a los nuevos estándares y a las nuevas exigencias en el mercado y, por eso, ya es habitual encontrar distintas opciones de carburante en los nuevos modelos. El nuevo compacto de Skoda, denominado Scala, que ya cumple con el estándar de emisiones Euro 6d-temp, no iba a ser menos y además de sus opciones convencionales de gasolina y diésel, incorpora el motor 1.0 G-TEC, diseñado para funcionar con gas natural comprimido (GNC). Eso sí, esta versión no llegará a los concesionarios hasta finales de año cuando.
Por el momento, la marca checa ha iniciado su comercialización en España con una gama compuesta por tres motorizaciones: dos TSI y una TDI; y cuatro acabados: Active, Ambition, Style y una edición especial de lanzamiento denominada First Edition. Se trata de una edición limitada, combinada exclusivamente con el motor 1.5 TSI de 150 CV con cambio automático, de 200 unidades que cuenta con selector de modo de conducción, faros Full Led, entre otros.
Además, desde el acabado de entrada, el Active, el cliente, explican desde Skoda, ya dispondrá de un amplio equipamiento de serie que incluye aire acondicionado, elevalunas eléctricos delanteros y traseros, llantas de aleación Alaris de 16″, sensor de aparcamiento trasero, asistente frontal, entre otros elementos. El acabado Ambition añade volante multifunción, radio bolero con pantalla táctil de 8″, climatizador bizona o los faros antiniebla; mientras que en el Style se incluyen las llantas Stratos de 17″, techo panorámico, sensor de aparcamiento delantero y trasero o faros led traseros con intermitentes dinámicos.
El precio de partida con campañas es de 13.990 euros para el motor de gasolina 1.0 TSI de 115 CV Active y cambio manual de 6 velocidades. En el caso de la gama diésel, la versión de entrada 1.6 TDI de 115CV Active, también con cambio manual de 6 velocidades, es de 15.550 euros.
Producido en la factoría checa de Mladá Boleslav, es el primero de los vehículos del fabricante basado en la plataforma modular transversal MQB-A0 del Grupo Volkswagen. Esto le permite emplear sistemas de asistencia de segmentos superiores como el LaneAssist, el detector de ángulo muerto o SideAssist con alerta de tráfico posterior y control de crucero adaptativo.
