Pablo M. Ballesteros/ Alberto Gutiérrez Molinero/ Madrid
Mario Armero, vicepresidente ejecutivo de la asociación española de fabricantes de vehículos (Anfac) ha informado de que gracias al Plan PIVE se han generado 25.000 matriculaciones adicionales, lo que para el Estado ha supuesto unos ingresos directos extra de 110 millones de euros, gracias al IVA y al impuesto de matriculación, entre otras tasas.
Para el vicepresidente de Anfac, el PIVE ha tenido un impacto muy positivo en el sector y en la economía española. En un encuentro con periodistas, desgranó los resultados del programa, elevando a 930 millones de euros el efecto económico para las 48 áreas de actividad que tienen algún vínculo con el sector de la automoción, entre ellas la de fabricantes, importadores, concesionarios, talleres, industria del reciclado y sector de componentes.
El propio Estado se ha beneficiado del Plan, ya que ha recaudado un total de 296 millones gracias al IVA por la compra de vehículos y al Impuesto de Matriculación de las 75.000 unidades vinculadas al PIVE.
De estos, 110 millones corresponderían a los 25.000 vehículos adicionales que se han matriculado gracias al PIVE, mientras que los restantes 186 millones corresponden a los otros 50.000 automóviles vendidos durante los meses de vigencia del Plan.
Además, Armero aseguró que de los 25.000 vehículos matriculados adicionalmente, 6.000 fueron fabricados en España.
El vicepresidente de Anfac, quien aseguró sentirse “impresionado” por su enorme impacto, explicó que la edad media de los vehículos destinados al achatarramiento ha sido de 17,2 años.
“Freno útil”
Para Armero, el PIVE ha sido un “freno útil” contra la subida del IVA en septiembre, además de ser un buen antídoto contra los ERE. Según Anfac, se han conseguido crear alrededor de 1.350 puestos de trabajo gracias al plan y se han conseguido mantener otros 3.150.
Otro punto positivo ha sido la rebaja de los precios de los coches, de un 4,6%. Según Armero, el IPC dejó de aumentar un 0,15% gracias al programa de incentivos, lo que generó un ahorro para el Estado de 200 millones de euros, ya que hay gastos que suben en función del IPC.
En cuanto al ahorro de combustible se estima que al año se ahorrarán 40 millones de litros de combustible gracias a la renovación de estos 75.000 vehículos. Además, se dejarán de mandar a la atmósfera 130.000 toneladas de CO2 y 89 toneladas de partículas.
En caso de que no se renueve el PIVE, Armero calcula que se venderán 630.000 vehículos en 2013. Con el PIVE y con la recuperación de la economía en el segundo semestre en España, se podrían alcanzar entre 850.000 y 900.000 unidades.
