Latribunadeautomocion.es/ Madrid
La agencia estadounidense reguladora de la seguridad en el transporte, la NHTSA, ha concluido que las baterías del vehículo eléctrico Chevrolet Volt no suponen un riesgo de incendio después de un accidente.
Esta es la conclusión a casi dos meses de investigación, como consecuencia de dos incidentes que se produjeron en las baterías de este tipo de vehículo, semanas después de las pruebas de choque que se le realizaron.
La NHTSA no tiene constancia de que el Chevy Volt u otro coche eléctrico se haya incendiado tras un accidente real como consecuencia de las baterías. De hecho, la agencia cree que los vehículos eléctricos son una opción segura para los conductores americanos, además de gastar menos combustible.
Por otra parte, la agencia cree que las modificaciones anunciadas por General Motors para reforzar la seguridad de las baterías del Volt reducen todavía más el riesgo de incendio.
Equivalente europeo
El Chevrolet Volt, que tiene su equivalente europeo en el Opel/Vauxhall Ampera es un vehículo de propulsión cien por cien eléctrica, enchufable, con una autonomía de entre 40 y 80 kilómetros, que es extendida a otros 500 kilómetros con la actuación de un pequeño motor de gasolina 1.4 que actúa únicamente como generador de energía eléctrica.