Yago López / Madrid
El pasado diciembre de 2009, cuatro años antes del tiempo establecido por la directiva comunitaria, la DGT decidió adelantarse al resto de Europa y aplicó el nuevo esquema para poder obtener el permiso de conducción de motocicletas A2, de baja cilindrada.
Esta decisión está trayendo numerosas consecuencias, una de ellas es que hace ilegales a los motoristas españoles con el permiso A2 fuera de nuestras fronteras. De este modo el motorista español conducirá de manera ilegal cuando cruce la frontera, exponiéndose a graves infracciones.
El sistema actual funciona de tal modo que los conductores con el permiso A2 deben esperar al menos dos años para poder acceder al carné A, más una posterior formación que en el primer borrador que preparó la DGT estipula al menos 17 horas entre teoría y práctica, algo que no se aplicará de la misma manera en el resto de Europa. Con esta formación se convertirá al carné de moto español en el más caro y difícil del continente según Anesdor.
Además, debido al alto número de horas de formación supondrá un coste adicional muy elevado, lo que según la patronal provocará la desincentivación en los clientes y una fuerte bajada en la matriculación de motocicletas de alta y media cilindrada, condenando al sector a la desaparición parcial.
