La industria automovilística española cerró los siete primeros meses del año con un superávit comercial de 2.223 millones de euros, lo que supone un fuerte incremento del 256,7% respecto al mismo período de 2010, según datos del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.
Este aumento del saldo comercial es consecuencia del crecimiento de las exportaciones, que aumentaron un 10,3% hasta julio, con 17.771,2 millones de euros, pero sobre todo del estancamiento de las importaciones.
De hecho, la industria española de automoción realizó importaciones por valor de 15.548,3 millones de euros entre enero y julio, cifra que presenta un mínimo incremento de sólo el 0,3% en comparación con el mismo período del ejercicio precedente.
El estancamiento de las importaciones se explica por la tendencia observada en el apartado de automóviles y motocicletas, con un descenso del 19,1% en los siete primeros meses del año, hasta 6.785 millones de euros.
Sector de componentes
En cambio, las importaciones correspondientes al sector de componentes para automóviles experimentaron una progresión del 23,2% entre los pasados meses de enero y julio, hasta situarse en 8.763,3 millones de euros.
Por lo que respecta a las exportaciones, en el ámbito de automóviles y motocicletas el crecimiento se sitúa en el 5,6%, con 12.136,5 millones de euros, mientras que en el de componentes alcanzan un valor de 5.634,8 millones, un 21,8% más. EP