El tercer fabricante de automóviles de Japón, Nissan Motor, suspenderá desde el miércoles su producción en cuatro plantas niponas por la escasez de un componente electrónico de Hitachi.
La cadena de montaje estará detenida todo el resto de la semana y se reanudará el lunes, mientras que se está estudiando “el alcance y la importancia” de la falta de estas unidades de control en la marcha de plantas en Estados Unidos. Por el momento, la suspensión en las cuatro plantas japonesas conllevará una reducción de la producción en unos 15.000 vehículos, según informaron fuentes de la compañía.
La unidad electrónica ideada por el japonés Hitachi controla la inyección de combustible y el momento de la ignición del motor y es fabricada en Japón y Estados Unidos.
Según Hitachi, sus problemas para proveer a Nissan están a su vez provocados por la falta de unos chips que son fabricados de manera exclusiva para sus sistemas y cuyos envíos empezaron a retrasarse a principios de julio.
Según el diario Nikkei, algunos gerentes de Hitachi especulan que la escasez de estos chips se debe a una reducción de la capacidad productiva de su proveedor debido a los recortes que ha provocado la crisis económica.
El grupo Hitachi ha indicado que negocia con el fabricante de chips para asegurarse un flujo constante del componente en agosto y meses posteriores.
El sistema de control de Hitachi es usado en un 90 por ciento por Nissan, pero también son necesarios para la fabricación de vehículos de Honda y Subaru. EFE