La Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto) llevará a juicio a las Administraciones Públicas con el fin de reclamar el dinero que las concesiones adelantaron en concepto del Plan 2000E de ayudas a la compra de automóviles.
Así lo ha acordado la Asamblea de Faconauto reunida hoy en la sede de la CEOE en Madrid, que calcula que la Administración adeuda una cifra que se eleva a los 13,9 millones de euros. Una cantidad que ni el gobierno central ni el autonómico reconoce ya que no se pudieron tramitar en el sistema informático que tramitaba las ayudas del plan.
No obstante, la patronal alega que tienen como prueba centenares de fax con acuse de recibo de los diversos concesionarios que demuestran la entrega de estas ayudas.
De las 11.880 operaciones que no se registraron en el sistema informático y que por tanto, la Administración no reconoce, 8 millones corresponden a las comunidades autónomas mientras que 5,9 se atribuyen al Ministerio de Industria. De hecho, el presidente de Faconauto, Antonio Romero Haupold, afirmó que algunos concesionarios pueden perder hasta 300.000 euros si no se reconoce el adelanto de estas ayudas.
La patronal de los concesionarios culpabiliza al Gobierno de esta situación, al haber diseñado un sistema de gestión del plan 2000E que desde un principio exigía a los concesionarios adelantar las ayudas a los compradores por cuenta de la Administración. Y es que a parte de la deuda mencionada, las Administraciones Públicas adeudan otros 44,4 millones de euros por operaciones en tramitación.
Prolongación del Plan 2000E
Desde Faconauto, en palabras de su presidente, quisieron dejar constancia de que el plan 2000E ha sido bueno para el sector del automóvil, por lo que piden al Gobierno su continuidad. Sin embargo, ante la posibilidad de que el Ejecutivo se niegue a ello han reclamado la eliminación o suspensión temporal del Impuesto de Matriculación, ya que es “un tributo anacrónico que otros compradores europeos no pagan”.
