El presidente de Seat, Wayne Griffiths, ha confirmado el lanzamiento de Cupra en EEUU «a finales de esta década» con la comercialización de una versión eléctrica del Formentor y un crossover eléctrico más grande. El primer modelo se exportaría desde Barcelona, donde se produce actualmente en la planta de Martorell, mientras que el segundo se ensamblará «en las fábricas del Grupo VW en Norteamérica, incluido México».
En la presentación de los resultados financieros de la compañía española de 2023, el directivo expuso que la llegada al gigante americano se hará «en una selección de estados de las costas Este y Oeste, y en estados del Cinturón del Sol. Todo ello, a través de un nuevo modelo de distribución», puntualizó, añadiendo, como adelantó este periódico, que para plasmar su implantación se unirán a un socio local.
Este anuncio se enmarca en un momento de fortaleza financiera de Seat SA, tras haber conseguido «los mejores resultados en 73 años de historia». El pasado ejercicio, según el sistema de contabilidad nacional, la compañía se anotó un beneficio después de impuestos de 548 millones de euros, frente a los 67,5 millones registrados en 2022. Por su parte, las ganancias operativos se situaron en un récord de 505 millones, con un margen sobre las ventas del 3,6% en comparación con el -1,1% precedente.
Estas cifras fueron posibles al alcanzarse una cifra de negocio histórica, con 14.169 millones, un 35% más, después de que se contabilizaran 519.176 entregas (+34,6%), de las cuales 230.739 fueron de Cupra (+50,9%), que volvió a romper su máximo, y 288.437 de Seat (+24%).
De acuerdo con el CEO, «2024 será el ejercicio de la maximización de la rentabilidad y de aumentar el rendimiento de las ventas sin perder calidad», un objetivo que se perseguirá en un escenario de «tormenta perfecta, con la inflación que vuelve a subir, los tipos de interés que siguen altos y una gran inestabilidad política». Pese a ello, Griffiths confió en que «las oportunidades sean mayores que los riesgos, que siempre existen. Asumo riesgos, soy realista, pero esto no podemos resolverlo solos», apostilló, lanzando una advertencia a la clase política.
Más allá de Cupra en EEUU: apuesta de futuro por Seat
Más allá del refuerzo de la estrategia de Cupra, el constructor ha señalado que Seat, en «la estrategia de crecimiento rentable de la compañía», desempeñará «un rol clave con el lanzamiento de coches híbridos enchufables y de bajo consumo mejorados hasta el final de la era de la combustión», lo que supone ampliar aún más su ciclo de vida previsto —hace meses, antes de la aprobación de la normativa Euro 7, estaba al término de la presente década— .
Así, la empresa ha informado que «el Arona y el Ibiza se renovarán en 2025, y en los próximos meses, se lanzará una versión actualizada del León, con mejoras técnicas y tecnológicas». A su vez, el Ateca «también se actualizará y ampliará su ciclo de vida».
«El año pasado se especuló con que íbamos a sustituir Seat por Cupra. Y aquí está la respuesta», subrayó el ejecutivo británico, enfatizando que «la marca tiene buena salud y un papel clave en el futuro».
Aparte de los lanzamientos comentados sobre tecnología térmica e híbrida enchufable, Griffiths aseveró que «estamos estudiando qué podemos ofrecer dentro del mundo eléctrrico, algo en el momento adecuado cuando las plataformas asequibles estén disponibles». Es decir, puso el foco en el proyecto que el Grupo VW está trabajando sobre el VW ID.1, que este periódico ha informado que se llevará a cabo junto a Renault.
De acuerdo con el CEO, «en una primera fase» la intención del consorcio germano es que se lance un modelo bajo la marca madre. «No tiene sentido todas a la vez, la prioridad es VW», aunque matizó que «el objetivo es claro de que tengamos un modelo de entrada para Seat, que está en la posición ideal para atraer a los clientes más jóvenes». No obstante, precisó que el momento «oportuno» para ello será cuando se dé una ecuación clara de negocio.
«Las inversiones y el empleo, en juego»
En su intervención, Griffiths expuso que «este año es crítico para nuestros objetivos de electrificación», por lo que consideró necesario «mandar un mensaje claro al Gobierno y los partidos en España». «Tenemos el objetivo de convertir al país en un hub de movilidad eléctrica, con una inversión de más de 10.000 millones de euros del grupo junto a más de 50 socios del proyecto Future: Fast Forward. Estamos cumpliendo nuestro compromiso. […] Sin embargo, la UE y España, no; hay un exceso de regulación que se está convirtiendo en una camisa de fuerza y contradice la autonomía estratégica que necesita Europa para combatir», remachó.
Además, comentó que le «preocupa la inestabilidad política» española y «las declaraciones que crean confusión en el consumidor» y que, en su lugar, se debería «crear un proyecto de confianza e ilusión», que exista «seguridad, estabilidad y metas realistas para poder seguir haciendo inversiones» y, finalmente, que «se vendan coches electrificados».
En este sentido, tras recordar el retraso de España frente a la media de la UE en ventas de eléctricos e híbridos enchufables —un 12% frente al 22% en 2023—, destacó: «Nos estamos jugando nuestro futuro». Así, apostó por que se «informe al cliente de que el VE es parte de la solución a la movilidad sostenible y no el problema, que se mejore la fiscalidad y se impulse la red de carga».
«Hace casi un mes que estamos esperando la respuesta del Gobierno tras la respuesta prometida por el presidente en el Foro de Anfac de mejorar el Moves. Se han perdido dos años y tenemos que recuperarlos. Las inversiones y los empleos están en juego, así de serio y nos lo tenemos que tomar en serio», sentenció.
Preguntado sobre el riesgo que corren los proyectos del grupo en España y sobre el margen temporal que hay para darle solución a los problemas, el CEO señaló que «en 2025 el mercado tiene que estar listo y nosotros también —en referencia a un mayor apoyo a los eléctricos y a que Martorell empezará a producir los small BEV a finales del próximo año—». «Es cuestión de meses que se dé una respuesta clara por parte del Gobierno en su apuesta por el VE», apuntó.
Fuentes de la compañía exponen que las inversiones ya anunciadas no correrían peligro, porque ya se están ejecutando y están comprometidas, no obstante, la falta de suficiente sensibilidad de las administraciones puede perjudicar en el futuro a los intereses del grupo en el país a la hora de que se asignen nuevos proyectos.