Tras más de dos décadas fuera de la Fórmula 1, Ford regresa a la competición de la mano de Red Bull Powertrains, para desarrollar juntas unidades de potencia híbridas que se implementarán en los monoplazas a partir de 2026, según ha anunciado el fabricante americano durante un evento de la escudería del toro.
El fabricante patrocinado por la bebida energética dotará de mecánicas a los equipos Oracle Red Bull Racing y Scuderia AlphaTauri desde 2026 hasta al menos 2030.
El objetivo de esta sinergia es el desarrollo de una unidad de potencia que se adapte a las exigencias del nuevo reglamento técnico. Esto incluye disponer para el año citado de un motor eléctrico de 350 kW y un nuevo propulsor de combustión capaz de admitir combustibles cien por cien sostenibles.
«Es fantástico dar de nuevo la bienvenida a Ford a la Fórmula 1 mediante esta alianza“, ha señalado el director y consejero delegado del equipo Oracle Red Bull Racing, Christian Horner, antes de añadir que «como fabricante independiente de motores, poder beneficiarnos de la experiencia de un OEM (fabricante de equipo original) como Ford nos sitúa en una buena posición frente a la competencia».
Por su parte, el CEO de la insignia americana, Jim Farley, ha declarado que «el regreso de Ford a la Fórmula 1 con Red Bull Racing refleja hacia dónde nos dirigimos como compañía: ponemos el foco en experiencias y vehículos modernos, cada vez más eléctricos y sustentados en software».
La creación del sistema híbrido en cuestión entronca con la meta por parte de Ford de liderar el camino hacia la electrificación que está experimentando el sector. La firma ha invertido 50.000 millones de dólares en este tipo de tecnología y confía en que a lo largo del presente curso logrará ensamblar 600.000 cero emisiones a nivel global. Una cifra que será de 2 millones para 2026, según sus planes.
