Citröen ha presentado hoy en un evento multimedia el último utilitario de su marca: el nuevo Citröen C3, el primero de los tres planteados en su programa C-Cubed, que saldrá en 2022, centrado en los mercados de Brasil, principalmente, y la India. El modelo, entroncado dentro de su segmento B, está fuertemente marcado por las características del SUV, y comenzará su proceso de fabricación a finales de este año en las instalaciones que Stellantis dispone en Porto Real, en el Estado de Río de Janeiro, y en Chennai (India).
Citröen lleva presente varios años en Sudamérica y quiere afianzar su estrategia comercial en el territorio, junto con el subcontinente indio, por lo que adaptará su producción a las regulaciones de estos países. Además, como la oferta queda ligado a estos escenarios, no está previsto que el nuevo modelo llegue, al menos a corto y medio plazo, a Europa.
Al acto de presentación han asistido presencialmente el director general de Citröen Vincent Cobée, su director de diseño, Pierre Leclercq, y la jefa de producto y estrategia de la marca, Laurence Hansen; a los que se han unido por videoconferencia desde Brasil Antonio Filosa, jefe de operaciones de Stellantis para Sudamérica, y Vanessa Castanho, responsable de desarrollo de Citröen en el país carioca.
«Hemos optado por un enfoque geográfico. Queremos llegar al 35% de las ventas fuera de Europa, y hemos empezado a trabajar con varios tipos de coche en mercados con fuerte crecimiento como Sudamérica y la India, que están en bonanza», ha declarado Cobée.
Diseñado para ciudad y extrarradio
El nuevo C3 recoge la arquitectura del Segmento B de Citröen y entrelaza su diseño y estilo con el ADN propio del SUV, que se remarca en su exterior, como ha destacado Laurence Hansen, con un aspecto sólido y duradero, semejante al C5 AirCross, para que las piezas puedan ser reemplazadas fácilmente. «Es un segmento B, pero con un código SUV para la ciudad», continuaba Hansen, quien agregaba que estos últimos son «muy populares en el mercado sudamericano».
Para Pierre Leclercq, diseñador global de Citröen, el nuevo C3 cuenta con unas «medidas únicas», pues mantiene las líneas de estilo de los últimos años y muestra «una identidad fuerte y una imagen joven y progresista». Al tratarse de una marca global, una de las fases fundamentales de su creación era que mantuviera el ADN de la marca, conforme con el patrón arquitectónico y funcional de los C4 y C5 X.
Cuenta con una extensión de 3,98 metros de longitud por 1,80 metros de altura, sus dimensiones le pondrían en rivalidad directa con otros modelos como los Suzuki Vitara Brezza, Kia Sonet o Tata Nexon. Se le han diseñado un total de 78 accesorios personalizables, entre ellos las opciones de color exterior (con esquemas de dos tonos y acabados de interior).
En un vistazo a su interior destaca lo compacto del mismo, con un cambio de forma del tablero, con el sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil independiente y soporte para teléfonos inteligentes. Se han trabajado los ángulos de aproximación, el diseño de las cámaras, se le ha elevado el asiento del conductor para mejorar la visibilidad, así como bajado la altura del volante. Por extensiones de espacio, la guantera puede albergar 20 litros de capacidad, mientras que el maletero supera los 300.
Extensión de mercado
Si bien el foco principal pasa por Brasil, la India será el otro escenario en el que se fabrique el nuevo C3 y se produzca con objetivo de difundirlo por el subcontinente asiático. En base a una posible expansión de sus límites, Cobée ha remarcado que, de superarse las expectativas del producto, «podría adaptarse a otras zonas de mercado», incluidos África u Oriente Medio.
Asimismo, Antonio Filosa, quien ha explicado que el coche «corresponde a todas las demandas del mercado brasileño», y ha adelantado la posibilidad de que pueda extender su presencia a toda Sudamérica, con el fin de abarcar las redes de Uruguay, Paraguay, Argentina, Chile y Colombia, entre otros países.
