Una de las prioridades de Luca de Meo desde que llegó a la dirección del Grupo Renault en 2020 es la de devolver al fabricante a los números negros. En mayo publicaron su estrategia de reducción de costes fijos, que se marcó como objetivo un ahorro de más de 2.000 millones de euros para 2022.
Para conseguirlo, se van a enfocar en eliminar redundancias y un buen ejemplo de ello es la decisión de unificar sus tres plantas en el norte de Francia —Douai, que ensambla turismos; Maubeuge, de comerciales; y Ruitz, de cajas de cambio— en una única localización especializada en...
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