Ignacio Anasagasti / Madrid
Seat está estudiando la posibilidad de fabricar un vehículo eléctrico en China, para comercializarlo en el mercado local, según han informado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector, que añaden que el proyecto se encuentra en una fase «muy inicial».
La producción, al tratarse del gigante asiático, se realizaría a través de una joint venture con una empresa china. En estos momentos, el Grupo VW forma parte de dos sociedades de riesgo compartido, una con SAIC y otra con FAW, para el montaje de modelos de VW, Audi y Skoda, así como de motores, transmisiones, componentes de chasis y sistemas de asientos. En total, el consorcio alemán dispone de 20 instalaciones industriales y abrirá otras dos de ensamblaje de vehículos en 2018.
De los dos constructores asiáticos, Seat podría trabajar con FAW, si se da luz verde al proyecto de fabricación, según diversas fuentes, que consideran al presidente del Comité Ejecutivo de la marca, Luca de Meo, como el principal impulsor.
Estas mismas fuentes informan de que una delegación de directivos chinos realizó una visita a Martorell, a mediados de diciembre del año pasado, en relación con la producción del eléctrico. Asimismo, el fabricante español tendría intención de expatriar a China, durante unos meses, a un grupo reducido de trabajadores (hasta un máximo de 20).
Para ello, y dado de que la estancia sería superior a dos meses, la dirección de la compañía tendría que acordar con los sindicatos un convenio específico para regular el traslado de personal. Una cuestión que, por ejemplo, ya se tuvo que hacer con el Ateca, un modelo para el que se destinó a profesionales de Seat a la planta de Skoda en Kvasiny (República Checa).