Hyundai ha nombrado a Polo Satrústegui presidente de la filial en España, un nuevo cargo que compaginará con su responsabilidad ejecutiva de director general que ejercía hasta la fecha y desde su designación en diciembre de 2014, según han informado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector.
El directivo madrileño, que asume, de este modo, el rol que desempeñaba en estos momentos el coreano Suk Hyun Ka, sale muy reforzado dentro de la compañía, que ha reconocido su exitosa trayectoria en la marca. Esta se remonta, en su última etapa, desde abril 2012. Entonces, asumió el cargo de director comercial, hasta que fue nombrado director general.
Antes de su segundo salto a la marca coreana, el ejecutivo había sido el máximo responsable de Infiniti en nuestro país, donde permaneció cuatro años y tres meses (2008-2012), según consta en su perfil de la red social LinkedIn.
Satrústegui ha pasado por muchas áreas de Hyundai, puesto que entre agosto de 1992 y diciembre de 2007 ya trabajó en el fabricante asiático, ocupando posiciones como la de director Comercial y Comunicación, de Marketing, jefe de Relaciones Externas y Competición y delegado de Ventas.
Testigo desde los inicios ‘low cost’ de la marca
Su incorporación a Hyundai fue en los inicios de esta en nuestro país, cuando entró de la mano del importador Bergé básicamente como una marca low cost. En los primeros compases de su andadura, vendía, por ejemplo, en 1995 —dato más antiguo registrado por este periódico— 9.612 turismos, un 22,1% más que el ejercicio precedente, con una penetración de apenas el 1,15%.
En todo este tiempo, la evolución del fabricante ha sido enorme, situándose en la actualidad como una compañía referente en tecnología, ofertando en su gama todas las mecánicas electrificadas, y siendo uno de los actores con mayor peso en el mercado en términos de matriculaciones.
Su récord histórico lo alcanzó en 2022, cuando, favorecida por un menor impacto de los problemas de aprovisionamiento de chips en el sector, finalizó como la tercera enseña con más entregas en España, con 59.509 unidades, con las que acaparó una cuota inédita del 7,23%. Estos resultados, unidos a los del resto de departamentos (VO y posventa), le permitieron alcanzar una facturación nunca antes vista de 1.131 millones de euros. Por su parte, logró situar al Tucson como el coche líder, con 21.985 unidades.
En 2023, hasta el 20 de diciembre, la coreana cierra el ‘top’ 5, con 56.121 operaciones, un 1,4% menos, según datos de Autoinfor. Con ello, representa un 6,2% del mercado total de automóviles.
La escalada de la compañía hasta las posiciones aventajadas del sector la ha hecho de la mano de la red de concesionarios, con la que Satrústegui ha forjado una relación muy estrecha y de confianza y a la que ha priorizado en la estrategia comercial, con una apuesta clara por el canal de particulares. Así, en el capítulo de rentabilidad, los distribuidores de Hyundai están entre los mejores, habiendo cosechado un 3% récord el pasado curso. Para este, se espera acabar entre el 2,5% y el 3%.
