El Grupo Mercedes-Benz consiguió en 2021 unos beneficios netos de 14.180 millones de euros, lo que representa 3,5 veces más que los 4.009 millones obtenidos en el ejercicio anterior. Cabe señalar que estas cifras no contemplan las ganancias de 9.216 millones de la escisión de Daimler Truck en el cuarto trimestre.
Estos resultados han sido posibles a pesar de que el número de vehículos vendidos cayó un 5% interanual. Durante 2020, la compañía matriculó 2.461.884 unidades, frente a las 2.330.169 del último curso.
Los ingresos, por el contrario, experimentaron un crecimiento del 11% desde los 98.576 millones de euros hasta los 109.648 millones. En la división de coches y comerciales el margen operativo se situó en el 12,7% (6,9% en 2020), hasta 13.919 millones.
Estos buenos datos, a pesar del descenso en el número de ventas, se deben a que, como el presidente del Consejo de Administración, Ola Källenius, ha señalado, “2021 fue un año de progreso estratégico”. En este ejercicio, el grupo aumentó las entregas de vehículos de alta gama un 30%, las de eléctricos un 64% y el Ebit ajustado se elevó un 105%. Mercedes-Benz recompensará a sus accionistas con un dividendo de cinco euros por título, frente al de 1,35 euros de 2020.
Pese a los actuales cuellos de botella y parones en las cadenas de montaje que está sufriendo actualmente con motivo de la falta de componentes, el grupo espera obtener este curso ingresos ligeramente superiores a los del anterior y que su Ebit se mantenga en niveles similares.