En 2020, Daimler desveló su estrategia de descarbonización completa para 2039, una iniciativa ambiciosa que afectaba a todas las fases del negocio del fabricante de Stuttgart. Para alcanzar esta meta, uno de los pasos imprescindibles es el de ofrecer modelos cero emisiones —para 2022, esperan contar con más de 10 vehículos 100% eléctricos—, que incluyen a su exitosa gama de comerciales.
Hoy en día, tres de sus siluetas de ligeros ya cuentan con esta posibilidad: Sprinter, Vito y EQV —estas dos últimas producidas en la fábrica española de Vitoria— pueden equiparse con baterías que les proporcionan, respectivamente, 55 kWh (155 km de autonomía); 35 kWh (150 km) o 90 kWh (357 km). Desde Mercedes-Benz Vans afirman que la EQV, siendo el tope de su gama y por el que optarán más particulares que los otros dos, es la que cuenta con las mayores prestaciones de autonomía, potencia y conectividad, en comparación con sus otros vehículos más orientados al uso profesional.
Sin embargo, la marca desveló una versión de la eVito en la presentación de las modificaciones de los carrozados que están disponibles para sus furgones. Esta, denominada Long Range, equipa con el acumulador de la EQV situado en la base de su plataforma, por lo que dispone de una autonomía similar, de 357 km en el ciclo de homologación WLTP. La segunda novedad que tiene esta vertiente de la furgoneta es la capacidad de recarga rápida en corriente continua de hasta 80 kW, que le permite alcanzar el 80% de su reserva en una hora. Con estas prestaciones, está disponible en dos batallas diferentes: 5,14 y 5,37 metros, que les proporcionan volúmenes de carga de 6 y 6,6 m3.
Lienzos en blanco
Gran parte de lo que hace a la gama de comerciales de Mercedes-Benz es la capacidad que tienen para ser modificados y convertirse en lo que requiera el negocio: únicamente en la presentación había ejemplos como coches fúnebres, ambulancias o cámaras refrigeradas. «Las furgonetas suelen estar asociadas al reparto de mercancías exclusivamente», afirmó el director de la división española de Vans de la marca, Andrés Orejón, «pero existe un amplio abanico de posibilidades para nuestros modelos cero emisiones».
Las empresas de preparación trabajan de la mano del departamento de homologaciones del fabricante y tienen que cumplir unos rigurosos criterios para poder ser aceptados en su programa —una vez dentro, sin embargo, los concesionarios las recomiendan a sus compradores—-. Los ingenieros de Daimler, eso sí, han procurado que la energía de las baterías se destine exclusivamente a la propulsión, ya que quieren garantizar su buen funcionamiento.