Opel trabaja con el objetivo de convertirse en una marca global, según anunció hoy el director general Comercial de la filial española, Enrico de Lorenzi. De Lorenzi, destacó que la marca alemana todavía es el referente en Europa del Grupo General Motors, pero que apunta a medio plazo a ser un testigo mundial del consorcio estadounidense, porque su objetivo es explorar nuevos mercados y tiene libertad para salir a ellos. Las controversias que esta estrategia puedan suscitar con la otra marca presente en Europa, Chevrolet, están, a juicio de De Lorenzi, superadas, porque se trata de firmas diferentes en objetivos y estrategias. En este sentido, De Lorenzi reiteró la posición de Chevrolet como marca de acceso en el mercado europeo, mientras que Opel conserva esa identidad de firma generalista.
El director general Comercial de Opel España destacó el "buen momento" por el que pasa la firma alemana, que ya se encuentra en la "recta final" de los problemas financieros y productivos que padeció el pasado año.
Uno de los referentes de esta buena situación reside en la planta española de Figueruelas (Zaragoza), donde el buen comportamiento del urbano Corsa en los mercados europeos ha facilitado ampliar la operatividad del tercer turno laboral hasta septiembre cuando los propósitos iniciales eran suspender la actividad nocturna de abril a octubre de este año.
Opel apela a una ambiciosa política de producto para cimentar su recuperación y en este marco se incluyen los 11.000 millones de euros en inversiones para los próximos cuatro años.
Uno de los referentes de su política de producto será el modelo Ampera, un eléctrico de autonomía extendida que, según De Lorenzi, "es un sólido proyecto de uso diario". EFE