La dirección de Nissan ha trasladado a los trabajadores de la planta de la Zona Franca de Barcelona las medidas que deberán aplicar para ajustar los costes y poder competir en igualdad de condiciones con las plantas de México y Sudáfrica y conseguir la adjudicación de la nueva 'pick-up', según han explicado fuentes sindicales.
El responsable de CC.OO. en Nissan, Raúl López, ha explicado que la empresa exige aumentar de 10 a 15 los sábados de trabajo obligatorio, que se podrán cobrar sólo con retribuciones monetarias, mientras que ahora el trabajador puede cobrar el 50% y tener un día libre.
La multinacional nipona también ha pedido 40 horas más de trabajo obligatorias por empleado y eliminar los días personales, que a cambio serán retribuidos.
Asimismo, la compañía exige una reducción de la masa salarial, aunque no ha especificado si se trata de una rebaja de los salarios, según ha explicado López. Entre las medidas se incluye también la necesidad de aumentar la productividad en un 6%, "lo que supone trabajar más y más rápido", ha aclarado López.
Los representantes sindicales se han comprometido a tratar el tema con los trabajadores, pero López ha lamentado que "no son ni las formas ni los plazos", argumentando que Nissan pretende renegociar el convenio firmado en julio.
Convenio colectivo
"En cinco días quieren negociar un convenio colectivo que nos traería al menos medio año", ha criticado López, que ha añadido que la empresa pretende adaptar las condiciones de trabajo "al estilo de países como China".
López ha añadido que la dirección de la empresa en España pretende utilizar la adjudicación del nuevo modelo como "chantaje". "Parece que quieran que paguemos el coche con nuestras condiciones sociales y laborales", ha concluido. EP