Los sindicatos han anunciado a Euromaster que van a plantear una demanda conjunta para impugnar los 82 despidos —la cifra se redujo de los 99 que había fijado inicialmente— planteados por la compañía, después de que hoy se hayan roto definitivamente las negociaciones, iniciadas el 13 de enero.
Según fuentes de la empresa consultadas por La Tribuna de Automoción, la última propuesta, presentada el 9 de febrero, ascendió a una indemnización de 38 días por año trabajado con un tope de 16 mensualidades y un máximo de 60.000 euros, al que habría que sumar el 50% del seguro de jubilación.
Una cantidad insuficiente a juicio de las centrales al considerar que en algunos casos estaba por debajo del mínimo legal de 20 días y 12 mensualidades. También rechazaban el hecho que en este cálculo no se incluyeran los variables, que la entidad considera escasos porque 2020 fue un ejercicio difícil.
Ante esta situación, Euromaster, que pertenece al Grupo Michelin, ha informado en la mesa de negociación, cuyo plazo concluía hoy, después de que hayan pasado 30 jornadas desde su constitución, que va a presentar el ERE ante la Dirección General de Trabajo para un máximo de 82 personas de un total de 747 empleados (el 10,98% de la plantilla). En él, las condiciones que se fijan son de 30 días, con un máximo de 15 mensualidades y un tope de 50.000 euros.
No obstante, mantienen la opción de que 34 empleados fijos —desde la compañía señalan que se podrían incluso incrementar si hubiera más peticiones— reduzcan su vinculación con la empresa, lo que se traduciría en menos salidas traumáticas.
Por ejemplo, se ofrece la jubilación anticipada para cinco trabajadores; a otros cuatro, el retiro parcial; cinco pasarían a fijos discontinuos; cinco de tiempo completo a parcial; cinco serían desplazados de centro y, entre otras medidas, a otros cinco se les aplicaría una excedencia para formación. Este último punto fue duramente criticado por los sindicatos que denuncian que ese proceso se debe efectuar en el seno de la empresa.
No reconocen las causas económicas
El motivo por el que los representantes de los trabajadores van a judicializar los despidos es porque no reconocen las causas económicas, productivas y organizativas que expone Euromaster, al argumentar que la Dirección General de Trabajo les pidió las cuentas auditadas de 2018 y 2019 y “faltaban las 50 páginas con las conclusiones de los auditores”.
Además, de que hay gastos atribuidos en los seis años de pérdidas con los que no están conformes, como por ejemplo, un incremento de las primas al Comité de Dirección del 57,02% en 2020 o que al pasado ejercicio se le atribuya un gasto de 2,5 millones de euros para el ERE que se va a ejecutar en 2021, o que la central facture dos millones de euros a la filial española, entre otras cuestiones.
En relación al primer punto, la compañía señala que hubo un problema con la aplicación de la Comunidad de Madrid para subir la documentación, pero que posteriormente se ha facilitado toda la información que ha solicitado la representación legal de los trabajadores.
Respecto al bonus de los ejecutivos, el director general de Euromaster en España y Portugal, Francis Ferreira, (la entrevista completa se publicará en la edición impresa de La Tribuna de Automoción de la segunda quincena de febrero), afirmó a esta publicación que se debe a la jubilación en 2020 de su antecesor en el cargo, pero que en los últimos años han reducido estos cargos de 10 a siete.
Del coste del despido colectivo aseguró que «en 2020 perdimos 3,3 millones de euros sin contar esa provisión» y sobre los dos millones que entregan a la central señaló que se hace por los servicios que da y que lo pagan todos los países proporcionalmente.
La federación de Industria de CCOO calificó, en una nota de prensa del 8 de febrero, los recortes de empleo como algo “del todo inaceptable que viniendo de un ERTE, donde la empresa matriz aceptaba unas pérdidas para el año pasado de 7,5 millones de euros, se hubiera terminado el mismo con algo más de 6,1 millones de pérdidas, incluidos la provisión de fondos para los despidos“.
Mala fe negociadora
Este periódico ha contactado en el día de hoy con las dos partes del conflicto que se han acusado mutuamente de mala fe negociadora. En el caso de Euromaster, aseguran que los sindicatos no negociaron el resto de las condiciones y que se centraron solo en los despidos para los que pedían 45 días con un máximo de 33 mensualidad, con una quita del 5% y jubilaciones anticipadas. Además, los trabajadores afectados debían ser voluntarios, al no reconocer la causa del ERE.
Por su parte, los sindicatos se han quejado de que la compañía en ningún momento fue clara, que recibieron quejas por la documentación que solicitaban y ni siquiera ante la petición insistentemente de la última oferta, les fue entregada. También han censurado las formas utilizadas por parte de algunos representantes de la empresa.
2 comentarios
mi marido trabajó durante 32 años en Euromaster y lo despidieron con el mínimo que se podía dar, 20 días por año trabajado con un máximo de 12 mensualidades, después de toda la vida dedicado a ellos. De eso hace ahora cuatro años. Se acogieron a perdidas tambien y le ofrecieron quedarse con el taller como franquiciado que para eso si había beneficios.
yo, haré todo lo posible para continuar trabajando en la empresa..y jugando mis bazas para pisar cabezas