Alberto Gutiérrez Molinero/ Madrid
En agosto, la producción de vehículos en España registró 54.633 unidades, lo que suponen 7.000 menos que hace un año, un 11,22% de descenso con respecto al mismo mes de 2013. Se trata de la primera caída desde enero de este año, provocada por el cierre de algunas líneas de montaje en distintas fábricas españolas para adaptar la producción a los nuevos modelos adjudicados.
Según la Asociación Nacional de Fabricantes (Anfac) «se trata de un pequeño parón para coger el impulso suficiente de cara a los próximos meses». En concreto, la fábrica de Nissan Barcelona ha comenzado ya a fabricar el Pulsar en serie, la de Opel Figueruelas también ha puesto en marcha la producción del Mokka y en Ford Almussafes ya está en el disparadero de salida el nuevo Mondeo.
El frenazo en el crecimiento de la producción se ha notado en el segmento de automóviles, donde se ha registrado un descenso del 25,81%, lo que suponen algo más de 13.000 unidades menos ensambladas con respecto a 2013. Esta caída no ha podido ser compensada con el nuevo avance de los vehículos comerciales e industriales que sumaron 7.500 unidades más que hace un año (+89,74%) impulsadas por el aumento en la fabricación de comerciales ligeros (+174.31%).
En lo que va de año, la producción de vehículos española registra 1.580.422 unidades, un 10,67% más que en 2013. Anfac confía en que se terminará el año en el objetivo de los 2,4 millones de vehículos ensamblados.
Exportaciones, también en negativo
Las exportaciones también se han visto afectadas por la caída en la producción en agosto y registraron un descenso del 6,14%, si bien mantienen el crecimiento en el acumulado de 2014, con 1.333.528 unidades, lo que supone un 7,32% más que hace un año. En total, el 84,4% de los vehículos fabricados en España se envía fuera de nuestras fronteras, hasta a 120 países del mundo.
